Organizar nuestra bisutería puede ser más complicado de lo que parece, pues el contacto entre las piezas hace que se puedan rayar o perder su color. Sin embargo, hay algunas formas muy atractivas de mantenerlas juntas sin que afecte a su apariencia. En este artículo damos unos sencillos trucos para organizar las joyas y accesorios.
La clave: ideas originales, caseras y prácticas
Lo más importante es emplear los recursos que tenemos en el hogar, así como pulirlos al máximo para que tengan un aspecto maravilloso. A continuación, mostramos los mejores trucos:
Cuencos de porcelana
Todos tenemos en casa cuencos de decoración que, con el paso del tiempo, acaban guardados. Por ello, una buena idea es utilizar los más atractivos para depositar las joyas. Además, se pueden pegar con cola en una superficie o dejarlos sueltos encima del comodín.
Un joyero detrás de la puerta
Otra de las opciones consiste en poner un joyero por detrás de la puerta. De igual modo, puede ser una especie de estantería con apertura para evitar que se caigan. Un espejo sería idóneo para añadir mayor comodidad, ya que permite mirarnos al probarnos las distintas joyas y elegir el mejor look.
Cartones de huevos
Los pequeños cartones, especialmente los de huevos de codorniz, son perfectos para guardar los pendientes más pequeños. Es la forma más barata y se puede adornar pintando y añadiendo pequeños dibujos. Asimismo, el envase transparente que recubre el cartón hace que estén bien protegidas.
Almacenaje a la vista
Quizás esta sea la idea más complicada, pero también es la que más nos gusta. Es necesario hacer un poco de bricolaje, ya que hay que cambiar la parte del tocador que está justo encima de los cajones por un cristal. De este modo, se puede dejar el cajón superior para los complementos, organizándolos en pequeños cuadrados, y así poder observarlos desde arriba aunque esté cerrado.
Cuadros en la pared
Otro recurso fenomenal puede ser utilizar un cuadro para exponer nuestras joyas en la pared, como si de una obra de arte se tratara. Para ello, hay que quitar la fotografía y el cristal, si lo tuviera. Después, se pueden pegar chinchetas o pomos para dejar los collares colgados.
Un frutero - joyero
Los fruteros y los expositores de turrón que usamos en Navidad son un recurso genial para dejar las joyas a la vista y tener fácil acceso a ellas en cualquier momento. En este sentido, se puede utilizar uno que tenga al menos tres pisos y pintarlo en tonos pastel. En la parte superior se pueden dejar los anillos; en la intermedia, los pendientes; y en la inferior, los colgantes, que ocupan más.
Un toque natural
Para añadir algo de naturalidad a la habitación, se pueden colgar dos troncos en la pared donde depositar los colgantes y, en su superficie, los anillos y pendientes. Del mismo modo, un árbol decorativo nos sería bastante útil para la misma función. Incorporar luces led hará que el conjunto sea todavía más atractivo.
Cajón de costura
Este es un espacio ideal para guardar nuestros accesorios, ya que cuenta con pequeños compartimentos donde conservar pendientes y anillos. De la misma manera, el resto del cajón puede emplearse para los collares. Por su parte, el exterior se puede adornar con flores, diseños y otros complementos.
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