Cada vez somos más las personas que decidimos divertirnos bailando, una actividad que requiere predisposición, disciplina y la utilización de unos complementos de baile que ayuden a que la actividad tenga mayor prestancia.
Para participar en un concurso de baile es imprescindible ir perfectamente ataviado para la ocasión. Y llevar unos complementos que nos ayuden a brillar. Por ejemplo, unas pulseras y pendientes. Lo mejor es que sea bisutería creativa.
Elementos a tener en cuenta al elegir los pendientes
1.- El tipo de peinado.
Con pelo corto o recogido, lo natural es que nos pongamos unos pendientes llamativos. Con el pelo suelto, da igual, apenas se verán.
2.- La altura.
A las bailarinas que no son muy altas les quedan mejor unos pendientes tipo perla, discretos y no muy grandes. A las chicas más altas les queda mejor llevar pendientes alargados porque contribuyen a potenciar sus rasgos.
3.- El rostro.
La forma de la cara. Si la tenemos ovalada cualquier pendiente nos quedará bien. Sin embargo, quienes la tengan más cuadrada deben huir de los grandes diseños angulosos. Y si la tenemos en forma de corazón, debemos evitar ponernos pendientes que acaben en pico.
Eso sí, con cara redonda lo mejor es buscarlos alargados y estrechos; nunca redondos.
4.- El outfit.
Porque un vestido con escote palabra de honor no admite el mismo tipo de pendientes que una blusa con el cuello cerrado o con cuello barco.
Para acertar hay una regla que siempre conviene tener en cuenta: cuanto más discreto sea el vestido, mayor protagonismo deben tener los pendientes y la bisutería en general.
Para los vestidos con cuello barco y los escotes palabra de honor lo mejor es decantarse por pendientes con caída para dar más realce a la verticalidad del cuello.
Si el escote es redondo o en forma de caja, lo que se recomienda es optar por unos que no sean muy largos para que la vestimenta pueda centrar la atención.
El decálogo para iniciarse en el baile
1.- Decisión.
Si nos sentimos atraídos por el baile debemos ser capaces de practicarlo, dejando atrás miedos y dudas.
2.- Buscar un buen maestro.
Quien consiga encontrar a un profesional que sepa enseñar bien esta disciplina, disfrutará de lo lindo.
3.- Las comparaciones son odiosas.
Mientras aprendemos a bailar no debemos compararnos con otras personas. La única meta que que debemos autoimponernos al comenzar en esta disciplina es la de mejorar poco poco, sin prisas. Sin pretender hacerlo mejor que alguien que lleva mucho tiempo bailando.
4.- Constancia.
Lo ideal es practicar siempre que sea posible, incluso en casa. Llegar a dominar la técnica del baile requiere de mucha dedicación e interminables horas de entrenamiento. Lo mejor es no conformarse con las clases, se puede practicar en cuanto se disponga de un rato libre.
5.- Calentamiento con estiramientos.
El entrenamiento dará mejores resultados si antes de comenzarlo realizamos unos ejercicios de estiramiento para calentar. De esta forma el cuerpo adquiere mayor flexibilidad y existe menor riesgo de lesión.
6.- La postura.
Tener una buena postura es vital. Hay que estar atentos para que todas las partes del cuerpo queden perfectamente alineadas.
7.- Relajación.
Las sesiones irán mucho mejor si al bailar conseguimos abstraernos de todo y pensar solo en el baile.
8.- Actitud positiva en las competiciones.
Para competir lo mejor es ir con actitud positiva, con intención de aprender de lo bien que baila el resto de participantes.
9.- Disfrutar.
Al principio merece la pena disfrutar del buen baile que practiquen otros competidores.
10.- Material de calidad.
Para bailar bien necesitamos estar cómodos. Y la comodidad será posible con una vestimenta de calidad. Una indumentaria que brillará más si la acompañamos con complementos de baile compuestos de bisutería creativa.
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